¿Cómo saber si alguien es de izquierdas o de derechas?
«Ser de izquierdas es, como ser de derechas, una de las infinitas maneras que el hombre puede elegir para ser un imbécil: ambas, en efecto, son formas de la hemiplejía moral». José Ortega y Gasset.
La intención del filósofo español, al utilizar la expresión «hemiplejía moral» es criticar a las personas que, ubicándose en la derecha o la izquierda, políticamente hablando, son incapaces de pensar de una forma extensa, más allá de su ideología (lejísimos de su significado originario, pues, el significado etimológico de «ideología» es «idea lógica», discurso racional…), de forma análoga a la persona que padece parálisis motora en la mitad de su cuerpo.
Mucho de ello hay en las intenciones de los capos de los cárteles mafiosos que nos malgobiernan, los jefes de los tinglados corruptos, de las élites depredadoras que se hacen llamar partidos políticos.
Nuestros políticos dedican gran parte de su esfuerzo a dividir a la sociedad en dos bloques enfrentados: derechas e izquierdas. De ese modo se garantizan el voto de sus partidarios y el control del poder.
Tanto unos como otros de los líderes de las élites extractivas, saben que lo peor que les puede pasar que, ponga en riesgo su capacidad de influencia y su poder, no es el voto en contra, sino la indiferencia, la antipatía y el desprecio de los votantes.
Hay españoles que se sitúan en uno u otro bando por «principios» que consideran irrenunciables, pero la mayoría proclama su pertenencia a la derecha o la izquierda por fanatismo (como los hooligans de cualquier club de fútbol) por pasión y odio; puro sentimentalismo tóxico.
Cada día es más evidente que en España no se ganan las elecciones sino que se pierden. Pierde el que concita mayor rechazo y odio y gana el contrario, aunque carezca de programa, de preparación, de cualificación, de capacidad, o de méritos.
Esa es la causa principal de que España sea un país mal gobernado y que soporte a una clase política zafia, despreciable, alejada de todo lo que huela a ética o decencia.
Teniendo en cuenta la terrible situación que sufren España y los españoles es importante conocer quién es de derecha y quién de izquierda según lo que afirma de sí mism, pero, sobre todo teniendo en cuénta su forma de comportarse.
El texto que hoy publicamos, tras haberlo retocado, es anónimo (circula desde hace mucho tiempo por las redes sociales) y merece ser retomado, pues ayuda a saber en que bando militamos o deberíamos militar (no olvidar nunca que, sólo se pueden sumar sumandos homogéneos), si nos libramos del odio y el rencor que los políticos y los medios de manipulación de masas y creadores de opinión nos inoculan. Pues, como decía un tal Averroes, «la ignorancia empuja al miedo, el miedo al odio y el odio a la violencia».
¿COMO SABER QUIEN ES DE IZQUIERDAS O DE DERECHAS?
- Cuando a un tipo de derechas no le gustan las armas, no las compra y listo. Cuando a un tipo de izquierdas no le gustan las armas, quiere prohibirlas hasta en las Fuerzas Armadas.
- Cuando a un tipo de derechas no le gustan los toros, no asiste a la plaza y punto. Cuando a un tipo de izquierdas no le gustan los toros, intenta prohibirlos y dedicar las plazas a mítines de su partido.
- Cuando a un tipo de derechas no le gusta el tabaco, no fuma. Cuando a un tipo de izquierdas no le gusta el tabaco, no descansa hasta intentar vetarlo para que nadie fume.
- Cuando un tipo de derechas es homosexual, vive tranquilamente su vida como tal ,sin molestar a nadie. Cuando un tipo de izquierdas es homosexual, hace ostentación de ello, participando “orgullosamente” en desfiles horteras exigiendo además una subvención publica.
- Cuando un tipo de derechas tiene problemas en su trabajo pide la cuenta y se marcha. Cuando un tipo es de izquierdas, levanta una queja por acoso laboral y hace huelga contra la discriminación de que fue objeto con el apoyo de su sindicato. .
- Cuando a un tipo de derechas no le agrada un programa de televisión, simplemente la apaga o cambia de canal o se va a la cama. Cuando a un tipo de izquierdas no le agrada un programa de televisión, demanda judicialmente al canal que emite el programa que no le gusta, por ser manifiestamente “facha”.
- Cuando un tipo de derechas es ateo, no va a la iglesia, ni a la sinagoga, ni a la mezquita. Cuando un tipo de izquierdas es ateo, no quiere ninguna alusión a Dios en ninguna parte, en ninguna esfera pública, y protesta contra las religiones y sus símbolos (salvo contra el Islam, porque no tiene los suficientes cojones)
- Cuando un tipo de derechas tiene problemas económicos, trabaja todo lo que puede, intenta pagar todas sus deudas.
- El de izquierdas le echa la culpa al gobierno, si este no es de izquierdas, claro; a los empresarios, a la burguesía, a los bancos y al capitalismo, a la globalización, a los americanos a Felipe II, a Franco, al Papa, al Real Madrid, al cambio climático, a la guerra de Ucrania… y a los extraterrestres…
Y así, hasta completar una lista larguísima donde la izquierda es intolerante y combativa, mientras la derecha es conformista y cobarde.
La derecha valora la libertad individual y la izquierda el poder del Estado. La derecha quiere libertad para abrirse camino y la izquierda quiere ser protegida por el poder público y recibir subvenciones.
La derecha quiere un Estado pequeño que intervenga poco, pero la izquierda quiere un Estado fuerte que lo controle todo.
La derecha suele creer en Dios y la izquierda poco o nada.
Si eres de derechas, leerás este artículo, te reirás y lo difundirás, pero si eres de izquierdas te cabrearás, destilarás odio hacia su autor anónimo y lo borrarás para que nadie lea estas verdades.