Aunque les parezca increíble, el muro de Berlín aún no ha sido derribado…
No se alarmen… El muro de Berlin fue derribado, pero el muro de las ideas marxistas siguió intacto, como si nada hubiera ocurrido, peor aún, se reconfiguró para seguir con su amenaza de esclavizar al mundo entero.
El gobierno de la República Democrática de Alemania (RDA), estaba desesperado de ver cómo la gente buscaba la manera de huir del paraíso socialista. Ejército, policías, perros asesinos y balazos no eran capaces de detener a familias completas que aprovechaban el menor descuido de los gendarmes y correr, aún cuando sabían que la frontera estaba minada y podían perder un pie o la vida misma. En 1961, Walter Ulbrich ordena levantar un muro de casi cuatro metros y de 155 kilómetros para hacer de la República Democrática la mayor cárcel del mundo.
Este muro de la vergüenza cayó en 1989, después de una visita a la RDA del presidente de los Estados Unidos de América Ronald Reagan donde dijo al gobierno: “tiren ese muro”.
Muchos brincamos de alegría, creíamos que allí empezaba el derrumbe del modelo marxista que ya había provocado millones de muertes innecesarias. Y cuando en 1992 desaparece la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas dábamos por confirmadas nuestras esperanzas.
Pero no, estábamos muy equivocados. Cayó el muro de concreto, pero el muro de las ideas marxistas seguía intacto, como si nada hubiera ocurrido, peor aún, se reconfiguraba para seguir con su amenaza de esclavizar al mundo entero. Hoy día el izquierdismo, fascismo y socialismo están más vivos que nunca.
¿Qué podemos aprender de este suceso?
- Las masas son capaces de soportar grandes sufrimientos, durante mucho tiempo. Si no se forman partidos u organizaciones que se propongan luchar por la libertad, el sufrimiento puede ser muy largo. China de Mao Tse Tung sufrió 71 años de hambrunas y muertes innecesarias hasta que murió su líder y entraron las ideas capitalistas con Deng Tsiao Ping; URSS de Lenin 75 años de socialismo; Cuba de Fidel Castro, 62 años y sigue padeciendo el infierno comunista; Alemania 41 años o más. Las masas no se liberan si no hay libertarios que asuman la tarea.
- Se esperaría que muchos alemanes se hubieran convertido en guerreros por la libertad. Luchadores para advertir al mundo el peligro y engaño cuando un líder prometa el cielo y las estrellas. Advertirle al mundo que todo régimen socialista consiste en un mundo de esclavos sometidos al poder de un déspota. Y que aún cuando tengas en el gobierno a gente bien intencionada, profesionistas, matemáticos y doctores del más alto nivel, pero no libertarios, todo termina mal. Pero el muro de las ideas socialistas impidieron la entrada de las ideas liberales.
- No hay socialismo bueno.
La estructura política del socialismo es muy simple: Un líder y los demás son subordinados. No hay propiedad privada y el líder es el que decide todo. Los individuos no desarrollan su pensamiento, no toman riesgos pues su papel es el de obedecer para ganarse el pan que el rey les arroja. Si el jefe ordena asesinar a un indeseable, lo tiene que hacer pues de otra manera se muere de hambre. Socialismo significa un gran desperdicio de vidas y talentos.
Socialismo y capitalismo son los dos grandes paradigmas del mundo. Lo más viejo es el socialismo, porque desde las primeras tribus se aplicaba, sin saberlo, sin denominarlo como socialismo. El jefe de la tribu decidía a dónde emigrar, dónde detenerse, quiénes iban a perseguir al mamut, quiénes cuidaban los niños, etc. Y si no obedecías, te mataban o tenías que salir corriendo y formar otra tribu.
El origen del capitalismo es reciente, data de no más de 20 mil años. Es muy reciente en la historia de la humanidad. Y aún no ha logrado desplazar al viejo sistema tribal del socialismo.
Después del fracaso de la tribu hitleriana en 1945, se forma la República Democrática de Alemania (1948). Pero ésta vivía bajo un régimen tribal estricto donde nadie podía tener propiedad privada, no podían ser dueños de las casas que habitaban, los individuos no podían tener empresas, los negocios estaban prohibidos, si tu garganta era privilegiada, le pertenecía al Estado, los servicios sexuales también los organizaba el gobierno. En realidad, los alemanes de la RDA estaban viviendo como si gobernara Adolfo Hitler.
Ahora bien, cuando cae el muro de Berlín y la gente se va a la otra Alemania supuestamente capitalista, se encuentran con algo muy curioso: las escuelas y universidades son gratuitas y pertenecen al gobierno; los hospitales, clínicas y centros de salud, en manos del gobierno; igual los transportes masivos, metro y autobuses urbanos y carreteras son de propiedad estatal. Algunos se percataron y pensaron: “Qué es esto, no que ustedes son capitalistas”. Claro, también encontraron negocios privados y eso marcaba una gran diferencia con la Alemania que habían abandonado. Era una combinación insana de socialismo y capitalismo.
¿Qué lecciones deja la caída del Muro de Berlín?
Lo más importante es derribar el muro de las ideas marxistas, socialistas, fascistas y nazis. Reconocer y vigilar que todo gobierno debe tener funciones claras y limitadas. Es decir, limitarse a cuidar que nadie mate a nadie, nadie robe a nadie y nadie cometa fraudes a nadie. En otras palabras, ningún gobierno debe meter las manos en la economía, ni en la educación, ni en la salud, ni en la administración del dinero, ni en la regulación de las empresas.
No aprender la lección, nos expone ante los demagogos, mesías y políticos que nos prometen el paraíso, pero nos dan el infierno.