El alcance total del desastre de Beirut “aún no se comprende”, afirma el ex jefe de inteligencia militar israelí… EXPLOSIÓN EN BEIRUT, TRÁGICA…PERO NATURAL…
Días después de las dos explosiones, una de ellas enorme que, arrasó Beirut, causando una destrucción incalculable, todavía no es posible comprender el verdadero alcance de la calamidad, dijo un ex jefe de inteligencia militar israelí.
Hablando en video conferencia con los periodistas, el mayor general, Amos Yadlin, quien se desempeñó como ex comandante adjunto de la Fuerza Aérea de Israel y ahora es director ejecutivo del Instituto de Estudios de Seguridad Nacional, señaló que Israel ha ofrecido asistencia médica a Líbano. “Este es un desastre terrible, terrible. La gran pregunta es cuántas personas murieron. Los números rondan entre 1,000 y 4,000″.
Al analizar los incidentes que condujeron a la explosión, Yadlin dijo que “comenzó con una pequeña explosión en lo que parece un depósito de fuegos artificiales. Y luego vino la gran explosión”, dijo, citando las 2.700 toneladas de nitrato de amonio reportado almacenado en un almacén en el muelle del puerto.
El nitrato de amonio “es un material utilizado para desarrollar explosivos”, dijo. “También es bueno para la agricultura, pero el hecho que haya estado allí desde 2014 dice que no se usaba para la agricultura. El propósito de este almacenamiento era para explosivos”.
Con respecto a la pregunta sobre quién era el dueño del almacén y por qué el material estaba allí, Yadlin dijo que “esto es algo que supongo que las autoridades libanesas están investigando”. “Al igual que sus amos iraníes, [Nasrallah] falló operacionalmente”.
Añadió que no se puede probar, en este momento, que se trataba de un almacén de Hezbollah. Sin embargo, si surgen indicios que este es realmente el caso, se formaría una “acusación muy grave contra Hezbollah”, que podría convertirse en una presión política significativa para que ponga fin a su papel como potencia militar en el Líbano y delegue ese papel en el militar libanés oficial, evaluó.
El nitrato de amonio ha sido utilizado anteriormente por agentes de Hezbollah en el extranjero para planificar un ataque terrorista. En 2015, un hombre libanés-canadiense vinculado a Hezbollah fue condenado en Chipre después que se descubrió que poseía 8,5 toneladas de nitrato de amonio en su sótano. Ese mismo año, el Mossad informó a las autoridades en el Reino Unido de cuatro propiedades en el noroeste de Londres que contenían tres toneladas de nitrato de amonio pertenecientes a Hezbollah. A principios de este año, el Mossad volvió a informar a Alemania sobre las actividades de Hezbollah en su suelo, incluidos los almacenes en el sur del país donde Hezbollah escondió cientos de kilogramos de nitrato de amonio.
“Este es otro golpe para el estado libanés que ya estaba [sufriendo] una gran crisis”, dijo Yadlin. Los factores que crearon esta crisis incluyeron graves problemas económicos, financieros, políticos y sociales.
Incluso antes de la explosión, las tensiones estaban aumentando en el país. En ese contexto, explicó, “lo importante es que Hezbollah está utilizando vecindarios civiles para almacenar armas. Utilizan barrios civiles como escudos para su actividad. Hay elementos en el Líbano y la comunidad internacional que piden a Hezbollah que deje de esconderse detrás de la excusa de que necesita estas armas contra Israel”.
Capacidad nuclear y hegemonía en Oriente Medio
Yadlin señaló que Israel no ha atacado al Líbano en 14 años, y que los dos países “no tienen una disputa real” sobre fronteras. Incluso un desacuerdo sobre los derechos de perforación de gas en alta mar en el Mar Mediterráneo “ya fue negociado por los estadounidenses”.
Hezbollah, dijo, está buscando excusas para mantener el conflicto con Israel. “Este es un muy buen momento para que los libaneses le digan a Hezbollah: ‘Tenemos tantos otros problemas, danos un descanso de tus excusas en donde de hecho, protegen los intereses iraníes’. El problema comienza con Irán enviando armas avanzadas a Hezbollah a través de Siria”.
En términos más generales, el eje terrorista iraní del que forma parte Hezbollah está bajo una gran presión, dijo Yadlin. Factores como la campaña de “presión máxima” de Estados Unidos sobre Teherán —añadida a la disfunción económica, el colapso de los precios del petróleo, la campaña de Israel para revertir el atrincheramiento militar iraní en Siria, la pandemia de coronavirus, el reciente asesinato del General de Fuerza Quds Gral. Qassem Soleimani— tienen todo contribuido al creciente descontento entre la población general.
“Los iraníes continúan, a pesar de todas las dificultades, con dos esfuerzos estratégicos: acercarse lo más posible a la capacidad nuclear y tener hegemonía en el Medio Oriente”, declaró Yadlin.
Hasta el momento, Irán ha fallado operativamente a la hora de disuadir a Israel, y Siria se centra en lo que queda de su guerra civil en Idlib, por lo que el jefe de Hezbollah, Hassan Nasrallah, decidió intensificar e intentar “vengar cualquier actividad israelí en Siria si los terroristas de Hezbollah serán asesinados. Esto es lo que sucedió la semana pasada, y Nasrallah decidió actuar”, resumió.
Nasrallah intentó calibrar sus acciones para que, por un lado, mataran a algunos soldados israelíes, pero por el otro evitaran una guerra total. “Al igual que sus amos iraníes, fracasó operacionalmente”, dijo Yadlin.
Ahora, a raíz de la explosión de Beirut, Nasrallah ha encontrado su excusa para “eliminar este tema de la agenda, especialmente si este almacén era un almacén de Hezbollah”, dijo. “Y ya hay muchas voces en el Líbano que culpan a Hezbollah por las dificultades financieras. Hay nuevas sanciones contra el Líbano debido a Hezbollah. El sistema bancario está colapsando debido a Hezbollah. Todos los libaneses saben que Hezbollah es el poder militar más fuerte en el Líbano con mucha influencia política”.
Con todas estas crisis múltiples en el Líbano, unidas por el último desastre en Beirut, algunos civiles libaneses probablemente pensarán “¿por qué necesitan otra dimensión de destrucción que vendrá de Nasrallah atacando a Israel? Así que creo que encontrará una escalera para bajar del árbol”, dijo Yadlin.
Cuando se le preguntó si el desastre de Beirut sentará las bases para que el Fondo Monetario Internacional brinde una asistencia importante al Líbano, Yadlin dijo que no está claro. “Por un lado, podría decir: ‘Dejemos de lado todo y ayudemos al Líbano’. Por otro lado … [la explosión] puede ayudar a aquellos que dicen que Hezbollah es el problema, y que este era un almacén de Hezbollah. El FMI podría decir ‘hasta que alejes a Hezbollah de las posiciones que tomaron en Líbano, no te ayudaremos a pesar del desastre”
Shimshon Zamir
Nacido en Argentina. Vive en Israel desde 1972.
Casado… tres hijas… 8 nietos.
Trabajó 30 años en la industria Química Israelí, hoy pensionado.
Graduado en Sociología.