EL PATRIOTISMO DE FERROVIAL Y ÉL DEL REY EMÉRITO
MIGUEL BERNAD, MANOS LIMPIAS.
La constructora Ferrovial, una de las empresas más importantes del IBEX 35, como bien sabe la mayoría de los españoles, ha decidido abandonar su sede en España e instalarse en Países Bajos, lo cual ha producido una cascada de críticas acusándola de «falta de patriotismo».
El argumento esgrimido por los máximos responsables de la constructora, se basa en que existe en ese país, una seguridad jurídica que, por el contrario, en España no existe.
Es cierto que la inseguridad jurídica de España, día a día es un hecho incontestable, por mucho que se alegue por el Gobierno que estamos en un «Estado de Derecho».
Con independencia de ese argumentario, tras la huída de Ferrovial se esconde también la fiscalidad mucho más beneficiosa en Holanda que en España.
En el dilema patriotismo-seguridad jurídica y mejor fiscalidad ha prevalecido el binomio seguridad jurídica-fiscalidad.
Es cierto también, que el crecimiento y el desarrollo de la constructora conseguido mediante concesiones de obras públicas por parte de los distintos gobiernos es argumento sólido -para algunos- para que no hubiera abandonado España y de ese modo haber mostrado al mismo tiempo su patriotismo y solidaridad.
El otro caso, que ha pasado de puntillas, lo representa el Rey Emérito, Don Juan Carlos i, que en recientes fechas ha fijado su domicilio fiscal en Emiratos Árabes para no tributar en España.
Si el Emérito regularizó, con privilegios, sus deudas con la Hacienda Española ¿Por qué ahora fija su domicilio fiscal fuera de España?
Blanco y en botella, una presunta fortuna todavía no ha aflorado y ello le eximiría, de descubrirse, de tener que dar cuentas a las autoridades fiscales españolas.
El mayor patriota de España, debería ser el Jefe del Estado, dando ejemplo a todos los españoles a los que supuestamente nos representa como patriota.
Nos encontramos ante dos ejemplos, nada edificantes y que demuestran que por encima de cualquier patriotismo, los intereses económicos no conocen de sentimientos patrióticos.
Fdo.: Miguel Bernad