¿ES JAVIER MILEI EL NUEVO TRUMP ARGENTINO? ¿PARA CUÁNDO UN MILEI ESPAÑOL?
CARLOS AURELIO CALDITO AUNIÓN
Argentina es el mejor ejemplo del fracaso del «estado del bienestar», de politicas progresistas, de políticas de izquierdas durante el siglo pasado. Argentina, cuando echaba a andar el siglo XX era uno de los países más ricos del mundo; y despues de aplicar políticas progresistas ha acabado convertido en uno de los más pobres.
Más estado, más burocracia, más subsidios, más impuestos, más leyes regulatorias, más y más economía intervenida y planicada, más y más inflación que en cualquier país decente, civilizado, han empobrecido al país, y a sus habitantes, y han dilapidado una gran parte del capital que se generó durante aquellos momentos de capitalismo argentino, de economía de mercado, de hace un siglo.
Todos los gobiernos más o menos liberal-conservadores que lograron gobernar en algún momento (venciendo al peronismo) terminaron generando una gran decepción pues quienes en ellos depositaron alguna esperanza vieron muy pronto que sus espectativas eran falsas, ya que no se efectuaron las reformas necesarias y aplicaron políticas socialistas.
Y, esta situación sufría Argentina cuando surgió Javier Milei.
Milei nació en 1970, y desde muy temprana edad decidió que quería ser economista, concretamente a los doce años, cuando Argentina ya había sido víctima de una hiperinflación.
La inflación en Argentina se mantuvo en general en un solo dígito entre 1900 y 1944, aunque con picos de dos dígitos en 1900-1901, 1917-1918, 1920, 1933, y con varios años de alta deflación. Entre 1945 y 1975, la tasa anual promedio fue de dos dígitos, con un gran pico de tres dígitos en 1959 (129,5%), y picos superiores al 30% en 1948 (31%), 1951 (36,7%), 1952 (38,8%), 1966 (31,9%), 1971 (34,7%), 1972 (58,5%) y 1973 (60,3%). En el período 1975-1988 se disparó un ciclo de altas tasas inflacionarias anuales de tres dígitos con picos en 1976 (444%), 1984 (626,7%) y 1985 (672,2%).1 Entre 1989 y 1990 hubo un pico de hiperinflación de 3079% y 2314% respectivamente. En la década de 1990, de la mano de la ley de convertibilidad del peso con el dólar, la inflación fue bajando hasta alcanzar niveles cercanos a cero. Con el estallido de la convertibilidad en diciembre de 2001 retornó la inflación, con tasas del orden del 20-25% para el período 2002-2017, aunque con dos picos de 47,6% y 53,8% en 2018-2019, que llevó a que la economía argentina fuera categorizada como «economía hiperinflacionaria». En 2020 la inflación fue del 36,1%, en 2021 alcanzó el 50,9% y en 2022 cerró en 94,8%, la cifra más alta desde 1991.
El gobierno que más inflación tuvo en la historia argentina fue el de Raúl Alfonsín (1983-1989), con un promedio anual de 592,28% y un pico hiperinflacionario en 1989 que llegó al 3079,5%.
Bien, tras este repaso a la trayectoria inflacionaria del estado argentino, volvamos a Javier Milei. Alrededor de 2014, se convirtió en seguidor de la Escuela Austriaca de Economía después de leer la monografía de Murray Rothbard sobre la teoría del monopolio, lo que lo impulsó a leer todo lo que pudo conseguir de Rothbard, Ludwig von Mises y especialmente del español Jesús Huerta de Soto. Desde 2014 hasta 2021 Milei apareció con muchísima frecuencia en televisión como economista defendiendo ideas libertarias, o liberales como se las llama en Europa, en una época en la que llamar libertario o liberal a alguien era considerado un insulto en Argentina.
En las elecciones de 2021, su grupo se convirtió en el tercero más fuerte del país y obtuvo representación en la Cámara de Diputados de Argentina en la primera vez que concurría a una elección. Tras conseguir representación en el Congreso de Argentina, comenzó de inmediato a hacer campaña para las elecciones presidenciales que habían de celebrarse en 2023. Su aumento exponencial de popularidad han llevado a Milei y sus seguidores a la victoria y a éste a ocupar la presidencia de la República Argentina.
Entre otras muchas cuestiones, Milei prometió reducir el número de ministerios de veinte a ocho, de los cuales ya tenía desde mucho tiempo a cuatro trabajando como ministerios en la sombra: economía, relaciones exteriores, bienestar e infraestructura.
En su juventud, Javier Milei fue futbolista semiprofesional y miembro de una banda de rock. Sus seguidores lo tratan como a una estrella, y muchos están tan apasionados tanto como él por su denuncia y su lucha contra la corrupción del Estado, contra el intervencionismo estatal, contra el saqueo al que tienen sometidos los políticos profesionales y los burócratas a los argentinos decentes… Sus principales partidarios son personas jóvenes. Incluso ha conseguido multitud de seguidores esperanzados entre los estudiantes de secundaria de toda Argentina. Tras haber llegado, -¡ Y de qué manera! a la juventud argentina, estos mismos jóvenes y adolescentes han dado el paso de contagiar a sus padres, abuelos y demás familiares…
¡Y Melei acabó ganando en la segunda vuelta de las elecciones para la presidencia de Argentina!
La primera acción emprendida por Javier Milei ha sido reformar la estructura organizativa del gobierno, pasando de 18 a 8 ministerios. A partir de ahora los ministerios son el de Interior, Relaciones Exteriores, Defensa, Economía, Justicia, Seguridad, Infraestructura y Capital Humano. Inicialmente no se despedirá a ningún burócrata, a ningún empleado público de carrera, pero sí se les reasignará para que se ocupen de otras tareas. Los nombramientos políticos no serán renovados y se reducirán al mínimo. Se eliminarán todos los privilegios de los funcionarios, como guardaespaldas y conductores, excepto en los casos en que sean absolutamente necesarios por razones de seguridad. Esta medida también incluye iniciar el proceso de privatización o cierre de todas las empresas estatales.
Lo siguiente será emprender una enorme reducción del gasto público, eliminando todo lo supérfluo e innecesario. Milei, en su primer presupuesto tiene intención de eliminar partidas de gasto que ascienden al 15 por ciento del PIB, para llevar a Argentina de la actual situación de déficit a la de superávit. Respecto de los ingresos, intentará eliminar el 90 por ciento de los impuestos, que sólo supone una recaudación equivalente al 2 por ciento del PIB pero que tienen un efecto distorsionador. También, su intención es bajar los impuestos restantes.
En tercer lugar, Milei pondrá en marcha una flexibilización de las normas relativas a las relaciones laborales. Despedir a un empleado actualmente es muy costoso en Argentina entre litigios e indemnizaciones. Esta medida está orientada a reducir esos costos empresariales y facilitar el despido. El contrapeso de esta medida es la implementación de un plan privado de seguro de desempleo. Con esta medida se pretende aumentar el número de personas empleadas en el sector privado de 6 millones de puestos de trabajo a 14 millones.
La cuarta medida consiste en una liberalización del comercio. El objetivo de esta medida es el libre comercio unilateral al estilo de Chile. Esto incluye la eliminación de todos los aranceles de importación y exportación y la reducción de las restricciones regulatorias.
Milei también tiene intención de llevar a cabo una reforma monetaria.
En sexto lugar, Milei tiene intención de emprender una reforma energética. Esta medida pretende eliminar todos los subsidios a los proveedores de energía mediante una recalibración del equilibrio financiero, para reducir los costos para mantener la rentabilidad de las empresas y minimizar el impacto en el costo para los consumidores. Esta medida abre una puerta a subsidios por el lado de la demanda para los hogares vulnerables. También buscan mejorar la infraestructura energética a través de un esquema de declaraciones de interés público para proyectos que serían financiados y ejecutados por el sector privado, pero para los cuales el gobierno podría proporcionar una garantía de ingresos mínimos.
La séptima medida consiste en fomentar la inversión. Esto se hará a través de un acuerdo legal especial para inversiones en minería, combustibles fósiles, energía renovable, silvicultura y otros sectores. Para fomentar la inversión, también se intentarán eliminar las restricciones cambiarias y los derechos de exportación.
Milei tampoco se ha olvidado de la agricultura, de ganadería y el resto del sector primario, para lo cual tiene previsto realizar una «reforma agraria» que empezará con el mejoramiento de la infraestructura vial a través de la empresa privada.
Otro pilar importante de su programa de gobierno es la reforma de la Administración de Justicia. Esta medida incluye la designación de un Ministro de Justicia con el consenso del poder judicial, así como la designación de un Ministro de la Corte Suprema sin afiliación política para cubrir la vacante actual, prohibiendo a los miembros del poder judicial ejercer política partidista, y promover la independencia presupuestaria del poder judicial. Además, Milei tiene intención de promover los juicios con jurado y juicios orales en todo el país.
La décima medida consiste en una reforma del estado del bienestar. Inicialmente se mantendrán las prestaciones sociales actuales. Su objetivo es avanzar a largo plazo hacia un sistema privado en el que los usuarios paguen por los servicios de salud y educación que consumen. En el corto plazo apuntan a brindar programas de protección de ingresos para mitigar la pobreza extrema, programas nutricionales, programas educativos para padres sobre estimulación cognitiva, mayor cobertura de preescolar, incentivos a la graduación, programas de integración de personas con discapacidad, promoción del acceso a la enseñanza privada y la eliminación de todos los intermediarios en la provisión de bienestar.
La undécima medida consiste en una reforma del sistema de enseñanza. Su objetivo es avanzar hacia un mayor grado de libertad para elegir los planes de estudio, los métodos y los educadores. La medida también incluye el lanzamiento de un programa piloto de bonos escolares. También establecerán un criterio de evaluación de las escuelas para que puedan competir por incentivos.
Su objetivo número doce consiste en una reforma sanitaria. Su intención es transferir los subsidios a la atención sanitaria de la oferta a la demanda para permitir una mayor libertad de elección y competencia. Esta medida incluye proporcionar los beneficios de atención médica existentes en forma de vales para que no haya restricciones a un proveedor específico.
La decimotercera medida consiste en una reforma de seguridad. Esta medida incluye reformas a las leyes de seguridad nacional, defensa nacional e inteligencia, así como una reforma al sistema penitenciario para incorporar híbridos público-privados e intensificar la persecución del narcotráfico.
Como se puede observar, Milei pondrá especial interés en lograr el equilibrio fiscal necesario, pues, si algo tiene claro es que la reíz, el origen de los principales problemas económicos de Argentina está en el enorme desequilibrio existente entre ingresos y gastos, el gasto desmesurado, el despilfarro, todo ello ligado a una enorme corrupción en todos los ámbitos de la vida argentina.
Lo más importante para Milei, en estos primeros meses, es estabilizar la economía y poner las bases de un régimen económico basado en reglas, que cambie para siempre la macroeconomía argentina, de manera que pase a ser más ordenada, a la vez que transparente y con baja inflación.
Después se podrán abordar otros asuntos pero, de lo que no hay duda es de que sin una economía sólida no se puede construir nada.
Tampoco tengan ustedes dudas de que quienes hacen profesion de la política -generalemente gente analfabeta o casi y mediocre- y el periodismo superficial de los medios de información, creadores de opinión y manipulación de masas harán todo el ruido del que sean capaces, para evitar que se hable de lo realmente importante. Milei y los argentinos decentes deberán intentar abstraerse del ruido y poner atención en lo importante, y poco o nada en lo que los medios procurarán hacer creer que es urgente, Milei y los argentinos decentes tendrán que hacer un gran esfuerzo para no distrarse… tendrán que apoyar las acciones emprendidas por su gobierno, empujar de forma entusiasta, pues estamos hablando de recuperar el sentido común, la sensatez, la libertad para vivir y comerciar, la igualdad de oportunidades, la seguridad jurídica, la igualdad ante la ley, la dignidad… y en suma la posibilidad de vivir una buena vida.
¿Para cuándo, también, un Milei en España, un Cincinato que aplique las acciones quirúrgicas necesarias para desencanallar España? ¡Ojala nos lo traiga el nuevo año, 2024!