La agenda oculta de Davos

Doug Casey

El Foro Económico Mundial se ha reunido recientemenete en Davos, Suiza. Allí han debatido acerca de los grandes asuntos que supuestamente inquietan y preocupan a los 8000 millones de seres humanos que pueblan el planeta Tierra. A la reunión de Davos han asistido los líderes mundiales más influyentes, al igual que los directores ejecutivos de las empresas más grandes, líderes de los principales medios de comunicación y académicos de primer nivel. También asisten banqueros centrales, junto con una amplia variedad de celebridades.

El Foro Económico Mundial es sin duda la mayor reunión de narcisistas, oportunistas y tontos del mundo, al menos fuera de la ONU. Pero la ONU es en realidad sólo para burócratas de nivel medio que piensan que es gran cosa vivir a lo grande a expensas del gobierno y fingir que son peces gordos. Davos es para personas con jets privados.

Durante 30 años patrociné una conferencia llamada Sociedad Eris que se reunía cada año durante tres días en Aspen, Colorado. Era para personas que habían hecho algo excepcional pero que tal vez no se conocían y yo pretendía darles la oporntunidad de conocerse. Podría haber evolucionado hasta convertirse en un Davos de orientación libertaria (liberales en Europa), de no haber sido por la falta de patrocinio corporativo y mis limitadas habilidades organizativas. Y el hecho es que absolutamente nadie tomaba en serio las ideas libertarias en aquellos días. De todos modos, puedo entender cómo pudo haber comenzado el FEM de Schwabenklaus.

Si me invitaran (y no hay ningún peligro de que eso suceda), lo trataría como un safari africano, para ver la exótica vida salvaje. Pero los clientes habituales no son el tipo de personas con las que me gustaría asociarme. O con el que cualquier ser humano decente debería asociarse. Pero, a decir verdad, hace unos años fui a un lugar parecido al WEF. Es posible que disfrute de las observaciones de primera mano ( enlace ).

FUENTE: https://internationalman.com/articles/doug-casey-exposes-the-hidden-agenda-of-davos/

Un tema importante este año fue utilizar la llamada “crisis climática” para promover políticas totalitarias que de otro modo la gente no toleraría.

Por ejemplo, hubo una presión para que la gente aceptara un sistema de crédito social disfrazado de sistema de seguimiento de carbono para ayudar a salvar el planeta.

No hay ninguna duda de que la mayoría de los países adoptarán algo parecido a un sistema de crédito social. Lo que tenemos ahora equivale a uno, con la ubicuidad de las tarjetas de crédito y los obstáculos que hay que superar incluso para abrir una cuenta bancaria, y mucho menos para obtener la aprobación de un préstamo o una hipoteca.

El mundo tiene un impulso y una vida propia. Está claro que se trata de una tendencia en movimiento y que está cobrando impulso. Por supuesto, los gobiernos van a meter sus sucios dedos en la matriz. La inteligencia artificial les permitirá correlacionar y utilizar teratones de datos para controlar a sus sujetos.

La energía liberada por la explosión de un teratón de TNT es de 4,184×10²¹ julios, equivalente a la de un terremoto de magnitud 12 en la escala sismológica de magnitud de momento, o a la energía solar que recibe la tierra diariamente.

Francamente, no creo que podamos hacer nada al respecto más que abandonar el sistema, lo cual no funciona para la mayoría de las personas. Pero el problema con la multitud de Davos es que están muy interesados en controlar a otras personas. Son entrometidos profesionales. Lo conveniente es mantenerse alejado de ellos todo lo que sea posible. Son peligrosos.

La mayoría de los asistentes a las reuniones de Davos son verdaderas personalidades criminales. Les gusta controlar a otras personas, lo cual es un signo de sociópatas. Va a ser difícil revertir el impulso que se ha creado en el mundo.

Quienes se reunen en Davos también estaban muy preocupados por el hecho de que la plebe se expusiera a “información errónea peligrosa”. Parece que les preocupa perder el control de la narrativa y buscan formas de suprimir el discurso que no les gusta.

¿Qué está sucediendo realmente?

Ningún hombre es más esclavo que un esclavo que se cree libre.

Si se quiere controlar a las masas, es importante contar con agencias de inteligencia, policía y otras formas de coerción física. Pero es mucho más fácil y económico controlar psicológicamente a las personas. Lograr que la formación académica, el entretenimiento y los medios de comunicación marchen al unísono es tan importante como controlar el aparato del Estado. Los tipos malos, y con esto me refiero a los que se oponen a la libertad personal y a los que están a favor del control gubernamental, ahora controlan todo el asunto.

Es un juego peligroso a largo plazo porque si en algún momento la gente descubre que ha sido engañada con mentiras y verdades a medias, el resultado será la ira. Pero eso puede llevar 50 o 100 años, ahí tienen el caso de China y la URSS como ejemplos.

Lo mejor para los controladores, “los que deciden”, es limitar el número de provocadores que ofrecen explicaciones alternativas. Si suficientes personas empiezan a pensar críticamente y a hacer preguntas, la ira podría extenderse. Me gustaría pensar que la población estaría en la calle con antorchas y horcas, dispuesta a colgar a esta gente de los talones.

Pero eso es poco probable. Las personas corrientes del mundo occidental estás sedadas con drogas psiquiátricas y/o piensan que están despiertas. Los poderes fácticos controlan la narrativa y no están dispuestos a cambiar el status quo.

El Director General de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y otros asistentes discutieron la pandemia de la “Enfermedad X”. Se trataba esencialmente de un grupo de globalistas que urdían juegos de guerra con su estrategia para centralizar el poder y reducir las libertades civiles durante la próxima pandemia.

Todo el mundo está preocupado por su salud personal y, en los últimos años, todo el mundo ha sido programado para preocuparse también por la salud del planeta.

Es interesante que un subtema de la gran película V de Vendetta fuera el uso de una pandemia por parte del gobierno para controlar a la población. Es un gran vehículo para difundir el miedo. El miedo mantiene a la gente a raya.

El miedo a morir por algo sobre lo que no puedes hacer nada por ti mismo (una enfermedad) es un gran dispositivo de control. Hay que confiar en las autoridades médicas. El problema es que todos siguen órdenes, al menos si quieren conservar sus licencias.

Al público, que sabe incluso menos de ciencia que de economía, se le ha dicho que la Tierra se va a ahogar por el derretimiento de los icebergs y de los polos, y todo es culpa suya. Será mejor que hagan lo que les dicen. El miedo es una gran cosa para mantenerlos en orden.

Javier Milei, el presidente anarcocapitalista de Argentina, fue a Davos y pareció irritar a algunos de los asistentes.

Cuando se le preguntó por qué asistió a la conferencia del FEM, dijo: “Para plantar las ideas de libertad en un foro contaminado por la Agenda socialista 2030 que sólo traerá miseria al mundo”.

Muchos libertarios se han mostrado escépticos con respecto a Milei, ya que casi todos los políticos simplemente dicen lo que creen que la audiencia quiere escuchar. Pero he sido creyente desde que se identificó como un AnCap, no simplemente un conservador o alguien descontento con ciertos aspectos del sistema. El hecho de que se identificara abiertamente como un anarcocapitalista me dijo que, de hecho, podría ser el verdadero negocio.

El hecho de que entrara en las fauces de la bestia justo después de que Schwabenklaus identificara a los libertarios como el problema ( enlace ) y diera un discurso impecable llamando a estas personas por lo que son, requirió verdadero coraje moral. No sólo habla, sino que camina.

Insto a todos a leer y escuchar su discurso para ver de qué estoy hablando ( enlace ). Es, con diferencia, el discurso más importante que se haya pronunciado en lo que va de siglo. Y puede significar que Argentina será el mejor lugar del mundo en los años venideros.

Los sociópatas se sienten atraídos por el gobierno y las organizaciones internacionales como el Foro Económico Mundial. Buscan poder y control sobre los demás a través de la coerción, los impuestos y más.